miércoles, 26 de agosto de 2015

El encontronazo con Ramos se suma a las polémicas que han enfrentado a Trump en las últimas semanas con otros periodistas, como la reportera de la cadena conservadora Fox News Megyn Kelly. A Trump no le sentaron bien las preguntas de Kelly durante el primer debate de los precandidatos republicanos para las presidenciales de 2016. Entre otras cosas, Kelly puso en cuestión sus suspuestos comentarios despectivos hacia las mujeres. Desde entonces, Trump no pierde oportunidad para criticar a la presentadora. En concreto, unos días después, comentó que Kelly sangraba por los ojos y otras partes, algo que fue interpretado como una alusión a que la periodista tenía la menstruación.

Evo Morales pide que le aten los cordonesImage copyrightYoutube de Amilcar Barral Image caption El video en el que se ve a Evo Morales no tiene autor y se volvió público gracias a políticos de oposición en Bolivia. Un escolta se agacha de inmediato para amarrar el calzado mientras Morales aguarda para continuar la caminata. El primero en divulgarlo fue el diputado del partido opositor Unidad Demócrata Amilcar Barral, según reportó la Agencia de Noticias Fides desde La Paz. Lee también la entrevista de Evo Morales con BBC Mundo en 2014 Las reacciones Es un acto "humillante y discriminatorio", dijo el senador opositor Arturo Murillo. Como él, varios detractores aprovecharon la aparición del video para criticar la actitud del presidente de Bolivia. En sus casi 10 años de mandato, Morales se ha caracterizado por viajar mucho y compartir comidas y partidos de fútbol en las poblaciones que visita. Además, acostumbra caminar entre sus seguidores con muy poca escolta o seguridad.
En el Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido oficialista, tardaron casi 24 horas en reaccionar ante la aparición del video. Nélida Sifuentes, vicepresidenta del Senado y alta dirigente del frente de Morales, considera que la filmación busca "dañar la imagen" del mandatario. "Algunos quieren hacer ver a nuestro presidente como si no fuera humilde", indicó. Los principales referentes del oficialismo boliviano evitaron referirse al incidente del video. Sin embargo, el diputado del MAS Víctor Borda llegó a plantear que el uso de las redes sociales debe ser legislado para evitar estos incidentes. "Se publicitan mucha cosas: insultos, discriminación y otras cosas, y hay que regular", propuso.

La tensa rueda prensa de Donald Trump de la que expulsaron al periodista Jorge Ramos de Univisión

"En ninguna parte del mundo me han sacado de una conferencia de prensa o de una entrevista por la fuerza, nunca. Esta es la primera vez". Eso decía el periodista de la cadena Univisión Jorge Ramos tras su expulsión de un evento organizado por el magnate Donald Trump este martes en Iowa (centro de EE.UU.). Ramos, uno de los periodistas hispanos más respetados en EE.UU. y crítico de los planes de Trump para hacer frente a la inmigración ilegal, fue sacado de la sala donde se llevó a cabo la rueda de prensa después de que tratara de hacer una pregunta al magnate sin que este le hubiera dado el turno. Lea: Cómo hará Donald Trump para que México pague por el muro en la frontera con EE.UU. Tras insistir en querer hacerle una pregunta, Trump le dijo a Ramos en repetidas ocasiones que se sentara y le conminó a que regresara a Univisión. Vea aquí el video del encontronazo Image copyrightReuters Image caption Un empleado de seguridad sacó inicialmente a Ramos del recinto, mientras el periodista le pedía que no lo tocara. Hace unas semanas, Trump demandó a Univisión por US$500 millones después de que la principal cadena en español de EE.UU. rompiera el contrato para emitir el concurso de Miss Universo -propiedad del magnate- tras sus comentarios xenófobos sobre los inmigrantes mexicanos. Tras el tenso intercambio entre Ramos y Trump, un empleado de seguridad hizo salir al periodista de la sala donde se celebraba la rueda de prensa, que estaba siendo retransmitida en directo por varias cadenas de noticias. Trump insistió en que Ramos se había puesto a hacer preguntas sin que él le diera la palabra. Según destaca desde Los Ángeles el periodista de BBC Mundo Jaime González, algunos medios en EE.UU. se han mostrado críticos con Jorge Ramos, señalando que al interrumpir a Trump este se comportó "más como un activista que como un informador". El incidente se volvió trending topic en Twitter y muchos internautas mostraron en esta y otras redes sociales su apoyo a Ramos, periodista de origen mexicano que en los últimos años ha sido muy crítico con las posturas de los republicanos sobre la inmigración ilegal. Tono desafiante Al cabo de un rato de haber sido expulsado, se permitió que Ramos regresara a la sala. Entonces el periodista cuestionó a Trump sobre sus planes para expulsar a los 11 millones de indocumentados que viven en EE.UU. y construir un muro en la frontera financiado por México.
También le preguntó por su intención, en caso de llegar a la Casa Blanca, de negar la ciudadanía a los bebés nacidos en EE.UU. de padres sin papeles, a los que el magnate se refiere con el término despectivo de "bebés ancla". Lea también: ¿Quiénes son los "bebés ancla" a los que Trump quiere quitar la ciudadanía? Trump contestó a las preguntas de Ramos en su habitual tono desafiante, interrumpiéndolo, sin dar detalles específicos, alardeando de su experiencia como constructor de rascacielos y reiterando que muchos de los inmigrantes que cruzan la frontera son delincuentes. "De la misma forma que a mí me saca de una conferencia de prensa, (Trump) querría sacar a 11 millones de indocumentados de los Estados Unidos", dijo Ramos tras el incidente. El periodista defendió que su trabajo fue "exclusivamente periodístico".El encontronazo con Ramos se suma a las polémicas que han enfrentado a Trump en las últimas semanas con otros periodistas, como la reportera de la cadena conservadora Fox News Megyn Kelly. A Trump no le sentaron bien las preguntas de Kelly durante el primer debate de los precandidatos republicanos para las presidenciales de 2016. Entre otras cosas, Kelly puso en cuestión sus suspuestos comentarios despectivos hacia las mujeres. Desde entonces, Trump no pierde oportunidad para criticar a la presentadora. En concreto, unos días después, comentó que Kelly sangraba por los ojos y otras partes, algo que fue interpretado como una alusión a que la periodista tenía la menstruación.

La crisis de la frontera se vuelve un problema político para Colombia

© M. D. Castañeda Cientos de venezolanos cruzan desde Táchira a Cúcuta. La crisis abierta por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, al decretar el estado de excepción y cerrar parte de la frontera con Colombia se ha vuelto un problema político para su homólogo Juan Manuel Santos. Su decisión de apostar por la vía diplomática y el diálogo le ha comenzado a generar críticas internas, entre los que le reclaman más firmeza ante las provocaciones del líder venezolano y una mayor presencia institucional del Estado en la frontera, donde ayer ya habían llegado cerca de 1.000 personas entre deportadas y repatriadas. El Gobierno colombiano no parece haber calibrado la imprevisibilidad de Maduro. El presidente venezolano decidió el pasado miércoles cerrar parte de la frontera durante 72 horas, después de que tres militares venezolanos resultaran heridos en un incidente en San Antonio del Táchira, atribuido por el Gobierno de Caracas a paramilitares colombianos y contrabandistas. Bogotá criticó la medida, pero sin levantar demasiado la voz; lo asumió como algo pasajero, como otro intento más de Maduro por buscar un enemigo externo para desviar la atención ante la crisis económica e institucional que vive el país. Lejos de apaciguarse, la situación ha empeorado desde que el viernes el mandatario venezolano decretase el estado de excepción, suspendiese las garantías constitucionales en cinco municipios fronterizos –el lunes lo amplío a un sexto- y haya vaticinado un “proceso duro y largo” para reabrir la frontera. Con cerca de 1.000 personas deportadas y repatriadas, caso de los menores de edad, al Gobierno colombiano no le ha quedado más remedio que empezar a hablar de “crisis humanitaria”. Frente al discurso grandilocuente y provocador de Maduro, que prácticamente ha intervenido todos los días desde que decidiese cerrar la frontera, Santos ha optado por buscar una salida diplomática al conflicto y ha insistido desde el primer momento por la vía del diálogo. Incluso se mostró abierto a tratar el asunto de forma directa con el presidente venezolano, algo que hasta el momento no ha ocurrido. Venezuela, ávido comprador de alimentos y bienes de consumo, es un importante socio comercial de Colombia y ha sido un actor relevante en el proceso de paz que se desarrolla en La Habana con las FARC. Muchos de los líderes de la esta guerrilla y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), permanecen en territorio venezolano, donde han tenido una fuerte presencia en los últimos años. La cauta postura de Santos, sin embargo, le ha terminado por generar críticas dentro de Colombia. Diversos sectores, encabezados por la oposición del expresidente y senador Álvaro Uribe, le reclaman mayor firmeza ante las declaraciones de Maduro y una mayor presencia institucional en la frontera. No fue hasta el domingo cuando se desplazó a Cúcuta, la localidad más afectada, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo. El lunes hizo lo propio la canciller, María Ángela Holguín, que se reunirá este miércoles en Cartagena de Indias con su homóloga, Delcy Rodríguez, para tratar de buscar una salida a la crisis. Ambos ministros fueron recibidos con frialdad por los habitantes de la zona, tradicionalmente partidaria de Uribe. Precisamente el expresidente, fue vitoreado a su llegada a Cúcuta el lunes por la noche. Prácticamente al mismo tiempo en que Maduro lo acusaba en una rueda de prensa con medios internacionales de ser el cerebro de la conspiración en la frontera, Uribe, megáfono en mano, lanzó un discurso que, lejos de tener fronteras, parecía no tener límites, al llegar a comparar la deportación de colombianos con el Holocausto judío en la Alemania nazi de Hitler. Las guerras verbales de antaño entre el propio Uribe y Hugo Chávez, silenciadas con la llegada de Santos al poder en Colombia, volvían a cobrar vida por momentos. La crisis fronteriza surge en medio de un contexto electoral para ambos países. Venezuela celebrará unas cruciales elecciones parlamentarias el 6 de diciembre y Colombia, comicios regionales el 25 de octubre. La decisión de Maduro de decretar el estado de excepción durante 60 días y no descartar prorrogarlo en el tiempo y el espacio implica que nadie podrá realizar campaña electoral en los municipios afectados. En el caso de Colombia, la oposición uribista, a la que las encuestas no auguran buenos resultados, trata de sacar rédito y aprovechar la baja popularidad del presidente. Mientras tanto, la crisis humanitaria está lejos de mejorarse. Migración Colombia aseguraba este martes por la mañana que se habían registrado ya deportaciones en La Guajira, otra zona de la frontera de casi 2.300 kilómetros, olvidada históricamente por las autoridades.