miércoles, 30 de septiembre de 2015

La policía de Río altera la escena de un crimen para encubrir un asesinato

La muerte de Eduardo Felipe Santos Victor (17 años) en la favela Providência de Río de Janeiro podría haber sido una más en un Estado donde, hasta junio de este año, la policía mató de media casi a dos personas al día. La versión oficial siguió la narrativa cotidiana de las favelas –"Narcotraficante muere al enfrentar a tiros la llegada de la policía"–, pero dos vídeos grabados por los vecinos, donde se registran los pasos de los agentes al adulterar la escena del crimen, cuestionan el relato oficial, que afirma que hubo un tiroteo y que miembros de la Unidad de Policía Pacificadora (UPP), en teoría formada por policías comunitarios, hallaron junto al adolescente un radiotransmissor, municiones y una pistola. En las imágenes, grabadas la mañana de este martes, un joven con la camiseta bañada en sangre fallece en el suelo rodeado de tres policías armados con fusiles y vestidos con chalecos antibalas. Aparece en la escena un cuarto agente que dispara al aire y entrega el arma que dejan junto al cuerpo del chico. Otro policía agarra una pistola, la limpia concienzudamente y se agacha para colocarla entre los dedos inertes del joven. Dispara. Dos veces. Se levanta y se queda, junto a los otros, contemplando el cadáver. Se da cuenta de que tiene la mano manchada de sangre y se la limpia contra la pared. Se corta la imagen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes escribir tu comentario sin restricción, solo te pedimos que seas moderado con las palabras, no insultos y cosas parecidas. agradecemos tu atencion.

Enrique Mercedes
Administrador